PARQUE EÓLICO
EN PROYECTO
S.O.S. EN LA SIERRA DE MIRA
Parejo a esto, se construirán pistas
forestales de 4 metros de anchura y con pendientes máximas del 8% para el transporte y
montaje de cada uno de los aerogeneradores. Estas pistas deberán permanecer en servicio
al menos los 30 años de vida que se estima que funcionará el Parque. Bajo cada una de
las torres se excavará una zapata de cimentación de 120 m² y se deberá dejar una
plataforma que permita el montaje de los aerogeneradores con gruas, asi como su posterior
mantenimiento.
Todo se encuentra ya dispuesto para meter
las excavadoras en tan preciado tesoro y extraer el recurso eólico del monte. Las torres
de medición de vientos, repartidas por toda la sierra, analizan el preciado recurso,
viento.
Mientras, en la Sierra de Mira vuela el águila perdicera, el águila real, habita el zorro y el jabalí, asi como las perdices y liebres, y todos desconocen las autopistas que se van a construir, el ruido de 45 dB. que van a dar los aerogeneradores en marcha, los pinos que se deberán de arrrancar para realizar las obras, y la modificación del régimen de vientos, sin contar con las aspas que surcarán el cielo y que se deberán de esquivar para seguir volando. ¿Qué pensarán los buitres que se acercan a buscar un bocado desde la serranía de Cuenca? ¿cuántos lagartos ocelados abandonarán sus piedras, quedando sin casa por el movimiento de tierras a que dará lugar la instalación? ¿seguirán manando agua las dos fuentes que se encuentran situadas en lo alto de la sierra?
Nos preguntamos que pasaría si los
12.000.000.0000 (doce mil millones) de inversión que supondrá el Parque se viera
amenazado por un posible incendio. ¿cómo se puede en un emplazamiento lleno de masa
forestal que frena la velocidad del viento mejorar sus características?. La instalación
una vez montada es vulnerable.
La Sierra de Mira y La Ceja son dos reductos que deberían estar catalogados en la Red de Espacios Naturales y encuadrarse dentro de la Red Natura 2000. Los motivos son mas que sobrados. La Sierra de Mira es la barrera natural entre la Serranía de Cuenca y el altiplano de Utiel-Requena. A sus pies discurre uno de los afluentes mas importantes del Rio Cabriel, el rio Ojos de Moya, que nace en Santa
Cruz de Molla; en él viven 5 parejas de
nutrias que conviven con las truchas comunes que difícilmente subsisten en un río
castigado por la contaminación (los pueblos no disponen de depuradora) y el uso
incontrolado del agua para el riego que se produce desde su nacimiento.
La Ceja, ocupa la extensión
por encima del pantano de Contreras que circunda el rio Cabriel con una gran masa forestal
y un acceso difícil al río, con un paraje similar al de las hoces del Cabriel, todavía
se pueden contar 7 parejas de águila real y 5 de águila perdicera las cuales ahora se ven
altamente amenazadas.
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El pueblo de Mira, con un término
municipal de gran extensión también dispone de emplazamientos antropizados en la zona de
la Muela, quizá con menor potencial eólico, pero sin ningún riesgo para los
ecosistemas que rodean al pueblo. Es lícito que un pueblo aproveche sus recursos
naturales pero no a costa de perder su patrimonio ecológico, que es patrimonio
de todos.
Todo tiene un precio, 4 millones de
pesetas de entrada y 400.000 pesetas por aerogenerador al año, es lo que se ha pactado
entre el Ayuntamiento de Mira y la empresa Energías Eólicas Europeas para autorizar una
de las mayores destrozas ecológicas en el entorno de las Hoces del Cabriel.
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